Isidro «Chiquito» Zagarzazú fue un gran emprendedor carmelitano. Hace más de 60 años tuvo la visión de apostar por la zona oeste de Colonia brindandole proyección internacional.
Isidro «Chiquito» Zagarzazú nació en el paraje Juan Gonzalez, a 15 kms de Carmelo, siendo el más pequeño de 11 hermanos. De allí la denominación de su sobrenombre de “Chiquito”. Se crió trabajando en el campo junta a su familia de origenes Vascos Españoles y Italianos.
Comenzó a trabajar en Carmelo en el astillero MDF en su original localización en las inmediaciones del actuar astillero Maffoni. Cuando abrió el Casino de Carmelo se presentó a hacer practicas como levantador de fichas. Tarea que le resultó muy dificultosa debido a que sus manos de ordeñador de vacas no tenía la flexibilidad necesaria. Fue ascendiendo en su carrera profesional convirtiendose en uno de los tres socios del establecimiento.
Junto a otros cuatro socios, fue gestor de la instalación de la primer radio comercial de Carmelo (CW 50 Radio Carmelo). Por la proximidad con Buenos Aires y su relación con la colonia artistica de allí, con la colaboración de su amigo de la infancia Juan Carlos Mareco (Pinocho), logró la visita a Carmelo de personalidades artisiticas de primer nivel de la Republica Argentina. Siendo una de las más destacadas la fiesta inaguración de Radio Carmelo en abril del año 1958. Participó el elenco completo de La revista dislocada de Buenos Aires (revista Délfor Dicásolo) que era el programa de radio más escuchado en Argentina por muchos años. Entre otras personalidades logró la participación del primer actor Argentino Luis Sandrini y Juan Carlos Mareco, de quien chiquito era padrino de uno de sus hijos que el cómico tuvo con la actriz Argentina Mariquita Gallectos. El evento se realizó en el auditorio del Cine Patria de Carmelo.
Isidro Zagarzazú fué un apasionado de los autos de carreras y las competencias. Fue el piloto de uno de los coches del preparador carmelitano Guillermo “Cacho” Gonzalez.
Junto a su primo Jose “Joshengo” Zagarzazú, Chiquito creó una agencia de representaciones comerciales en la calle 19 de Abril, en la esquina inmediata después del cruzar el puente giratorio de Carmelo. Por muchos años representó la linea inglesa de camiones Leyland. También otras marcas de autombiles y motos. Fue nombrado representante de la compañía aérea Brasilera Varig.
Su relación entrañable con el dueño de FIAT Uruguay, Gustavo Maihlos (de la reconocida familia Maihlos de Uruguay), se gestionó la idea de montar algunas lineas de automóviles FIAT en la zona del Puerto de Carmelo (Marcopel). La mayoria de los componentes eran importados de Italia, lo que genero una inusual actividad economica en Carmelo y la zona de influencia.
Su espiritu curioso y emprendedor lo llevó a viajar por el mundo. Entre sus viajes estuvo en Europa varios meses con uno de sus socios de la radio, Ulises Lobecio. De su último viaje trajo la idea de crear un polo turístico en Carmelo que atrajera especialmente a turistas de la ciudad de Buenos Aires.
El proyecto del Balneario que tenía «Chiquito» era compartido por carmelitanos, palmirenses y vecinos de zonas rurales cercanas que conocían y disfrutaban de la tranquilidad de los médanos y de la playa que la zona les ofrecía. Pero como todo emprendedor, también encontró personas que decían que Playa Seré (la playa principal de la ciudad de Carmelo) era suficiente y no había necesidad de otra playa. Con su determinación este proyecto fue transformado en realidad y lo ejecutó con mucho esfuerzo y lo concretó en realidad en poco tiempo.
En el año 1960 Chiquito adquiere un predio de 300 has. ubicado sobre ruta 21 a 8 km de la ciudad de Carmelo y muy cerca del histórico puente de Camacho y Capilla de Narbona donde iniciaría su gran proyecto. Isidro estaba convencido que la playa del lugar que él había adquirido en las costas del Río de la Plata tenía un gran futuro.
Chiquito compró las tierras a la asociación Salorio, ahí no existía nada. Isidro instrumentó el fraccionamiento de todos los lotes y la aprobación de los mismos. Donó los terrenos necesarios para que se construyera infraestructura de luz, agua y calles del Balneario. Chiquito pagó a la empresa Hidrosa de Montevideo para que el pozo semisurgente de agua corriente proveyera de agua a todos los lotes. Hizo colocar todos los postes y tendido de luz electrica a efectos de electrificar todo el Balneario.
El actual desarrollo de los pinares en el Balneario es el resultado de una lucha sin cuartel contra los predadores naturales de los pinos y otras especies de arboles que impedían su crecimiento todos los días. Él le compraba todos los pinos a la Barraca Isoco de Carmelo (hoy el Silo de Torrieri).
Su visión y emprendedurismo inspiro a otros inversores y realizadores inmobiliarios del Rio de la Plata a multiplicar sus inversiones y proyectos en Carmelo y su zona de influencia.
Un aeropuerto para Carmelo
Con su espíritu visionario, Chiquito apostó a la construcción de un aeropuerto buscando el desarrollo de esta zona del país. Donó las tierras, pagó la construcción y el aplanamiento de todos los medanos y la traída de todo el balastro. Para lograr la categoría de aeropuerto internacional, constituyó la Comisión Pro Aeropuerto de Carmelo con cuyos miembros trabajó incansablemente durante seis años en el proceso de autorización de las instalaciones y la pista de aterrizaje por parte del gobierno Uruguayo.
Acompañado por el periodista Roberto “Tito” Ortiz, quien trabajaba en el diario el Municipio de Carmelo, Chiquito viajaba a Montevideo para tramitar en 5 ministerios diferentes la aprobación del aeropuerto. Finalmente todo estaba listo y solo faltaba la firma del presidente para lograr la aprobación -en ese momento era el General Gestido-, Chiquito viajaba en su coche a Montevideo cuando se enteró por radio que Gestido había muerto. Eso demoró 2 años más la aprobación hasta que se volvió a rehacer todo. Fué Jose Pacheco Areco quien terminó firmando la aprobación al asumir como Presidente.
Un sueño hecho realidad
En su momento la pista tenía 1,100 metros de largo y 30 metros de ancho. Era un taxi way, pista de carretera, y los aviones iban a una aeroestación construída y pagada por el mismo Chiquito Zagarzazú. Él también pagaba el salario a los 5 autoridades que debían estar 24 horas: aduana, policía, migraciones, sanidad e inspector de aviación civil. Luego donó todo al estado con la condición que fuese aeropuerto internacional.
La comisión hizo tareas de promoción del aeropuerto de Carmelo entre los socios de aeroclubes, especialmente de Argentina (Aeroparque Jorge Newbery, Don Torcuato, San Fernando, Morón, El Palomar, etc.) estableciendo una línea aérea entre varios aeropuertos de Argentina y Carmelo logrando que nuestra ciudad pasara por primera vez a formar parte de la ruta aérea de muchos ejecutivos y familias de mayor poder adquisitivo permitiéndoles descubrir Carmelo y hacerse asiduos permanentes de la zona.
Al haber construido y logrado la autorización de Aeropuerto Internacional, Chiquito Zagarzazu permitio la posibilidad de la radicación en nuestra zona de muchos inversores de gran magnitud. Estos inversores comenzaron a desarrollar actividades permitiendo el gran desarrollo con que actualmente contamos y que sin duda va a continuar. El Aeropuerto de Carmelo ha sido el gran «llamador» y la puerta de entrada a Carmelo para ese nivel de inversores que nunca venían a Carmelo por nuestra falta de infraestructura adecuada a sus exigencias y que solamente invertían y veraneaban en Punta del Este.
Hoy los grandes emprendimientos con hoteles cinco estrellas, canchas de polo, club de golf, clubes de campo, confirman que aquel sueño que tuvo Don Isidro Zagarzazú era posible con trabajo y dedicación.
Seleccionado para potenciar el crecimiento de la zona
En 2022 la historia del Aeropuerto se sigue escribiendo cuando entra a una etapa de crecimiento con la concesión del Estado Uruguayo a Corporación America Airports. Se proyecta con este acuerdo una modernización y expansión regional e internacional para el aeropuerto y la zona . La cita contó con la visita del presidente de la República, Intendente de Colonia, Alcaldesa de Carmelo, Gerentes de la nueva concesión y invitados de la zona para marcar este momento para la Zona Oeste del país. Más info en sección noticias.
Chiquito siempre tuvo la visión de comercializar el Balneario en Argentina . Se hizo conocido en Buenos Aires y se comercializó junto a otros atractivos de Carmelo incluyendo el Hotel Casino. La firma Vinelli era una de las inmobiliarias más importantes de Buenos Aires quien lo comercializó como un destino en el exterior cerca a Buenos Aires, garantizado por ellos. Muchas familias hicieron del Balneario su escapada de fin de semana o verano, llegando por via nautica o avión.
Para consolidarse como destino, Zagarzazú construyó (junto al constructor Bulfo de Carmelo) un Parador con la idea de tener un lugar donde la gente que viajase de Buenos Aires se quedará y pudiera disfrutar el aeropuerto. El parador fue dado en concesión en varias oportunidades y en los años 70’ funcionó como restaurante y en la planta baja como hostería al estilo YMCA para albergar a jóvenes turistas. Actualmente está a la venta .
El logo original del Balneario fue diseñado por Eduardo Arbeleche (quién diseñó el escudo de Carmelo). Los colores fueron elegidos por Artigas. Eduardo ayudaba mucho a Chiquito con sus diseños y era un creativo que le afinaba las ideas de punto estético. Era amigo de toda la vida. En 2016 el logo fue renovado por Lucas Canedo (un amigo de la familia) inspirado en el original y la visión a futuro del Balneario.